Hoy hace justo dos años que me senté en esa silla, “del otro lado”, de ese que nunca querría haberme sentado…

Hoy hace dos años fue el día de: “no tengo buenas noticias…”

Hoy hace dos años que una parte de mí, se quedó en esa silla, sentada, para siempre.

Hoy hace dos años que me levanté de esa silla, que la vida me dio la OPORTUNIDAD, de conocer a esa persona, esa parte de mí que no conocía, de descubrir, de sentir sentimientos desconocidos, otros olvidados, de recomponerme día a día, de reinventame entre la incertidumbre, de mirar hacia donde nunca había mirado, de cambiar…

Ahora esa silla forma parte de mi vida, me gustaría que no estuviese ahí, y no tener que sentarme periódicamente “del otro lado”, esperando la frase que toque ese día…

Pero esa silla me ayuda a valorar, a distinguir, a pisar en el suelo, a separar lo que sí de lo que no, lo importante de lo irrelevante….y así, cuando la duda es muy grande, o el enfado, la preocupación o la rabia me nubla…entonces me siento, mentalmente, de nuevo en esa silla…y desde allí sentada puedo distinguir fácilmente LO QUE DE VERDAD IMPORTA.

Hoy hace justo dos años….que sigo viviendo…DESPUÉS DEL CANCER.